Al llegar en tren a Merced el autobús nos estaba esperando, así que metemos los petates y seguimos viaje. Según nos acercamos a las montañas, la lluvia se empieza a convertir en un poco de nieve, y la niebla se nos echa encima. Nos damos cuenta que llegamos a Yosemite, porque acabamos de cruzar la caseta de entrada al Parque Nacional, como no se distingue nada, le comentamos al conductor si nos puede dejar en el Camp 4. El autobús empieza a parar y la gente se baja, después de unas cuantas paradas y cuando solo quedamos nosotros tres en el bus, se para y nos dice que es nuestra parada.
Nuestro comedor Nuestras tiendas
Entre la niebla distinguimos un parking vacío de coches y la caseta del ranger que habíamos visto en las fotos y donde se hace cola para tener sitio legal donde poner la tienda, pero no seria nuestro caso, porque solo había una tienda en todo el Camp 4!!!
Como ya se hacia de noche montamos las tiendas debajo de unas sequoyas y nos hacemos la cena en el sotechado de los baños de minusválidos, que eran los únicos que estaban abiertos.
Al dia siguiente me levanto un poco antes que Albert e Inés, y que hay un poquitín de niebla pero que esta despejado!!! Me doy un paseo por los alrededores y flipo con las vistas, paredes y el ambiente de estar en Yosemite recién nevado...
Lost arrow El Capitán
Desde el primer te cruzas con fauna salvaje, como el coyote que veía todos los días por la mañana, también hay ciervos, osos, pumas, pero estos mejor no verlos y ardillas, toneladas de ardillas...
Este primer día decidimos conocer el valle, ir a ver el Capitán, saber donde están los supermercados, las tiendas, el Lodge, la biblioteca para acceder a internet (tardamos una semana en encontrarla).
Los siguientes días siguen haciendo sol y buen tiempo, menuda suerte, empezamos a escalar las vías mas sencillas de fisura, al fin y al cabo tenemos que empezar a escalar aquí... esto de las fisuras es muy diferente!! También hacemos vías clásicas de varios largos.
La roca, aunque es granito, es muy diferente a la de la zona centro de España, este granito esta mucho mas pulido y es menos adherente.
Alucinamos con la buena suerte que estamos teniendo con el tiempo, sigue haciendo muy bueno, y aunque hace un poco de frió a veces (el fondo del valle esta a 1.500 mts) todos los días tenemos sol.
La rutina es la de siempre, levantarte e ir a tomar el café al lodge y ver que puedes pillar para desayunar, y si no, acabar de desayunar de lo nuestro en el Camp 4. Buscar unas vías para hacer, preparar el material y pasar el día escalando.
Como casi no hay escaladores en el valle, no tenemos problemas de que nuestra vía este ocupada Solamente los fines de semana se nota mas afluencia de escaladores.
Esto es el Yankee!!
Una de las cosas que nos sorprendió muy gratamente, es que los americanos nos parecieron muy majos en general, siempre intentando ayudarte cuento te ven "despistado", no solo en Yosemite, también en San Francisco. De echo, en el autobús urbano del valle, nos pregunto una chica que hacíamos por allí y al final nos dijo que trabaja en un bar del valle, que fuésemos que nos invitaba a unos chocolates... Creo que en España tenemos un concepto del Yankee erróneo...
Yosemite no solo es famoso por sus Big Walls, también tiene algunos de los bloques más famosos del mundillo de la colcho. Un día nos fuimos a la tienda de montaña del Curry Village y me pille mi colcho. Cuando estábamos cansados de frustrarnos en la fisuras y sobre los pedales, nos íbamos a hacer boulder que no dábamos tanta pena...
Siempre acababamos en el Midnight Lighting
Una de las ideas que teníamos era hacer algún big wall clásico, con su noche en pared y demás El más sencillito es la South Face del Washington Column. Así que para coger mas truquillo al artifo nos fuimos al Capitán a hacer algunos largos de la Nose.
Desde abajo el Cap impresiona, parece mentira que haya gente que suba en poco mas de 2 horas!
Largo 1 de la Nose
Poco a poco la nieve se va fundiendo, ya llevamos una semana y todos los días con sol, esto es un lujo.
Los Royal Arches y la Washington Column
El día anterior por la noche dejamos preparado el material y el agua y comida para 2 días La vía tiene una repisa muy cómoda para dormir, a 3 largos del suelo.
Menudo sufrimiento subir el petate hasta la base de la pared. pero luego nos daríamos cuenta que es mucho mejor llevarlo a la espalda que arrastrarlo por la pared!!!
La vía en si hasta la repisa no tiene mucha dificultad y como llegamos más o menos pronto, intentamos fijar algún largo más, pero al techo del siguiente largo le falta alguna chapa y tiene puesto un cordino, a ver al día siguiente como se da.
En el hotel de inmejorables vistas!
En la guía, ponía algo sobre tener cuidado con los habitantes de la repisa, nos extraño hasta que en mitad de la noche asomo por allí una especie de zarigüella!! como diablos había subido hasta allí!!! en fin toda una experiencia el dormir atado.
Al día siguiente hacemos algún largo mas y nos bajamos, hay que venir un poco mas con el rodaje echo de los estribos y con un poco mas de material... aun así lo disfrutamos como enanos.
Lo que más me llamo la atención es lo rápido que coges temperatura en mitad de un big wall!! porque aunque era Marzo, en cuanto nos empezó a dar el sol, nos empezamos a quitar ropa como posesos, parecía que estábamos en un horno, no me quiero imaginar que sera en julio-agosto.
Con el pequeño cerdito a la chepa
De vuelta en el Camp 4 nos damos cuenta que algún ratón se nos a colado en la caja anti-osos y me ha echo algún estropicio en la toalla, menos mal que no entraron en la de la comida, porque con lo barata que es en Yosemite...
Al principio las ardilla te hacen gracia, pero al segundo día las odias, y como no tengas ojo te lo comen todo.
Los días van pasando y conocemos la famoso Chongo, un personaje que vivía en el valle hasta que los rangers lo echaron. Estuvimos echándole una mano a traducir al castellano un libro que había escrito sobre física quantica, hay es nada, aunque era su explicación sobre la materia...
Ya me quedan solo un par de días para ir a conocer San Francisco, Alberto e Inés se quedan por estas tierras otros 2 meses y pico. Al final no nos llovió ni un día, vamos, que nos tocó la lotería con el tiempo. El invierno se va acabando y las cascadas empiezan a coger caudal y el valle empieza a llevarse de gente. Es increíble lo que ha cambiado en 15 días.
Mi ultimo fin de semana, vendrían Marea y unos amigos suyos a hacer boulder, así que estuvimos muy entretenidos con ellos, enseñándonos los bloques buenos del valle.
Según vamos recorriendo los bloques recordamos la historia de ellos que hemos leído en los libros, el Wine boulder, o el de las siguientes fotos, el Cocaine Corner. Llevamos 2 semanas aquí y todavía no me creo que este en Yosemite.
Al final llego mi día de partida, me despedí de Albert e Inés y cogí el bus rumbo a San Francisco. Habíamos estado hablando sobre que iban a hacer ahora, querían ir a Las Vegas, el desierto y escalar por allí luego al final de su viaje, volverían a Yosemite. Así que me volví a España con las ganas de haber visitado los lugares y parques nacionales de la costa oeste que tantas veces hemos visto en las pelis...
Quien me iba a decir que 4 años después volvería al Yankee para hacer ese viaje, pero esa es otra historia que ya os contaré.
